Los revolucionarios no estudian por los clásicos
Supongo que para conducir un ejército o acaudillar una revolución no hace falta leer a los clásicos en sus originales. Basta con una buena antología o una selección de textos. Y supongo también que para ser un buen profesor no es necesario alzarse en la montaña, ni “ocupar” la redacción de un periódico, ni hacer una guardia del CDR… a menos que se sienta vergüenza por esa sedentaria, pero notable profesión.
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire